Morena pierde poder de convocatoria en Quintana Roo.

Por David García.

La preocupación en los fundadores del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en Quintana Roo es palpable, no están de acuerdo con las decisiones que está realizando su dirigente estatal, Johana Acosta Conrado.

«Desde Tulum hasta Isla Mujeres, pasando por Playa del Carmen y Cancún, no la queremos. Ella no ha trabajado por la gente, no la conocen, ella no representa los principios del partido ni los intereses de la cuarta transformación», señaló una de las fundadoras de Morena en la entidad.

El problema radica en que Johana Acosta ha sido mal asesorada por su círculo cercano, haciéndole creer que es más importante estar presente a través de las plataformas digitales que caminar las calles. La joven Acosta, está tratando de pocisionar un formato de programa a base de entrevistas, donde únicamente invita a personalidades afines a ella, entre ellas, su pareja sentimental, la presidenta municipal de Felipe Carrillo Puerto.

El programa ha sido duramente cuestionado por militantes de Morena, quienes señalaron que, en lugar de buscar posicionar su imagen y la de su novia utilizando el presupuesto del partido, debería estar caminando las calles y llevando el mensaje de la cuarta transformación, del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Lo que sí es indiscutible es que, ante la falta de liderazgo de la joven Johana, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) está ganando terreno y poder de convocatoria entre los jóvenes quintanarroenses, y detrás muy de cerca se encuentra el partido de la Alegría, Movimiento Ciudadano.

Los dirigentes nacionales de Morena no deben hacer oídos sordos a lo que se está pensando en Quintana Roo, y deben tomar decisiones prontas, si quieren mantenerse como fuerza política en la entidad.

Lo que está sucediendo ya es inevitable, no se puede esconder. Para muestra, lo que ocurrió la tarde de este sábado en Tulum; ante la convocatoria de su dirigente estatal, Morena apenas logró reunir a poco más de 200 personas, entre niños, militantes y simpatizantes.